Mi cuerpo plano
Ya no tendrá odio.
Las fábulas serán en mi vida.
El cuerpo sin polos.
¿Te dije que regresaría de manera positiva?
esto es lo que estoy haciendo,
de verdad.
Con mi cuerpo plano.
No absorbe ya las calumnias.
Los secretos rojos.
Mi cuerpo plano,
sin seguridades,
todo fluido.
Plano para que no se atore con tu indiferencia,
con tus tácticas de volcán.
Mi cuerpo plano.
Sin dolores adquiridos,
con los dones merecidos.
Atando los afectos de la lluvia de tu voz.
Un cuerpo encomendado,
para no maltratarle,
no desviar sus virtudes.
Un cuerpo que no tiene memoria.
Mucho mejor.
Casi respirando de forma automática.
Mi cuerpo plano.
Adelgaza a la deshonra.
Aun no está preparado para estar ahí.
¿Tiene caso volver a verte?
Mi cuerpo plano,
grueso en dulzura.
Mi cuerpo plano,
avanza en la vida,
no se detiene.
Fuertemente respira.
Las manos que habilitan.
Sólo por hoy mi cuerpo no engordara,
no dará cabida a lo que le aflige.
Mi cuerpo plano,
luminoso,
bien amado.
Templo de meditación,
soledad que desconoce.
Lentamente. Progresivamente.
Hasta que el día vuelva a amanecer y el cuerpo plano llegue a vivir de los rostros literarios
Foto superior: Esteban Badillo López.
Foto inferior: Ángel Zuñiga C.